Parece que desde hace un tiempo están de moda las
series de época. Reconstrucciones históricas hemos tenido varias de mucha
calidad y asesoradas por historiadores de prestigio, como la serie Isabel, a la que le siguió Carlos, Rey Emperador. Ambas series
fueron emitidas por Televisión Española en horario de máxima audiencia y
tuvieron un gran éxito, dando lugar a una película, La corona partida.
Pero hay otro grupo de series, centradas, en su
mayoría, en historias de amor, que sin ser propiamente históricas, mencionan e
incluyen en su argumento los acontecimientos de la época en la que están
ambientadas según la visión de los protagonistas y cómo les afecta en su vida
diaria, en su relación o en la localidad donde viven. A través de estas series
podríamos seguir los avatares históricos de España enlazando una a otra con una
suerte de continuidad que a veces es buscada y a veces fruto de la casualidad.
Los protagonistas son siempre personajes ficticios, normalmente una pareja de
clases sociales diferentes que ven como las circunstancias (la mayoría de las
veces marcadas por los acontecimientos políticos o sociales de su época) hacen
peligrar su amor.
Mencionaremos algunas de ellas tratando de
organizarlas cronológicamente según la época en la que están ambientadas.
La primera de ellas sería, paradójicamente, la que suele
pasar más de puntillas por la Historia. Hablamos de El secreto de Puente Viejo, serie que Antena 3 comenzó a emitir en
febrero de 2011 y que continúa en la actualidad, siendo una de las más longevas
de la televisión en España. Ambientada en un pueblo ficticio, Puente Viejo, se
centra en las historias de amor, desamor, amistad y odio de los habitantes del
municipio. En 1902 Pepa, una humilde partera, conoce al amor de su vida, Tristán,
un veterano de la guerra de Cuba. A lo largo de los más de 1500 capítulos que
lleva en emisión hemos oído a los habitantes de Puente Viejo hablar de los
diferentes acontecimientos históricos que se han ido sucediendo desde 1902
hasta 1924, año en el que se sitúa la acción en este momento. Ya sea a través
de un artículo en la prensa que lee un parroquiano o de uno de los afectados
personalmente (un vecino que es llamado a filas), hemos sabido del reinado de
Alfonso XIII o el Desastre de Annual, por ejemplo. Pero lo que más “adorna”
Puente Viejo no son los acontecimientos políticos del país, sino la llegada de
avances como el teléfono, el cine o la electricidad; inventos como el secador, el
reloj de pulsera o el timbre eléctrico y acontecimientos deportivos.
En el año 2008 TVE estrenó la serie La Señora ambientada en los primeros
años 20, que tenía un importante tono
histórico, aunque centraba la atención sobre la pareja protagonista, ella una
chica de la alta burguesía y él hijo de un minero, pero contando cómo la situación
laboral y la lucha de clases ponía obstáculos a su relación. Tras terminar esta
ficción con un gran éxito de público y varios premios, TVE decidió continuar
con algunos de sus personajes y así se estrenó a principios de 2011 su nueva
apuesta: 14 de abril, la República.
Los últimos momentos de la República, la guerra civil española, la Segunda Guerra Mundial y el delicado equilibrio de poder europeo
en los años posteriores, son los acontecimientos que enmarcan la vida de Sira
Quiroga en la novela de María Dueñas El
tiempo entre costuras, adaptada a la pequeña pantalla por la productora
Boomerang TV y emitida por Antena 3 en 2013 con gran éxito de audiencia y
numerosos premios. Fue una auténtica superproducción televisiva. Aunque la
Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial pillan muy lejos a la protagonista (que se
traslada a Tetuán, capital del Protectorado español de Marruecos) la joven se
verá inmersa, sin querer, en la política y conocerá a grandes personajes de la
época.
En 1942 arranca la acción de la miniserie Lo que escondían sus ojos, basada en la novela de Nieves Herrero, emitida
por Telecinco a finales de 2016. Narra la historia de amor secreto entre un
importante ministro español y una marquesa. Una producción de lujo donde no han
faltado los vestidos de Balenciaga, los palacios y los hoteles de cinco
estrellas para ambientar una historia de la alta sociedad española, que
contrasta con la mayoría de las series situadas en este período, mostrándonos
la otra cara de la misma realidad.
Volviendo a TVE, en septiembre de 2005, estrenaba Amar en tiempos revueltos una serie que
tenía la clara intención de durar solo una temporada (pero duró siete), pues
comenzaba con un flashback en el que la pareja protagonista, Andrea y Antonio,
acompañados de su hijo, huían de la situación política del país. Tras estas
primeras escenas la acción se trasladaba a 1936 y contaba, desde el punto de
vista de los protagonistas, los acontecimientos de esa época, retratando
también los tiempos de la guerra y la posguerra en sus diferentes temporadas.
Desde las cartillas de racionamiento y el estraperlo hasta la mejora económica,
el ingreso de España en la ONU o la independencia del Protectorado de
Marruecos. Año a año se nos iba contando la historia de amor de una pareja
diferente pero con la continuidad de algunos personajes como la familia Gómez,
dueños del bar El Asturiano, y, como un protagonista más, un escenario siempre
común: la plaza de los Frutos. TVE dejaba de emitir la serie a finales de 2012,
poniéndole fin cuando la ficción se encontraba en el año 1957. Atrás quedaban 7 años de emisión diaria, 1716
capítulos, 4 especiales, siete libros con historias de los personajes más queridos
y varios millones de espectadores muy fieles que se negaba a que la serie
acabara.
Por esto, Antena 3 comenzó a emitir, en enero de
2013, los primeros capítulos de Amar es
para siempre, su continuación, con un nuevo y elocuente título, para
alegría de sus seguidores. La familia Gómez volvía a las pantallas tras poco
menos de dos meses de ausencia, aunque en la ficción habían trascurrido tres
años. En la actualidad, ya se han emitido más de 1100 capítulos y la historia
(sin visos de finalizar) ha llegado, contra todo pronóstico, al año 1968 cuando
los personajes celebran la victoria de Massiel y su La, la, la en el Festival de Eurovisión, consiguiendo así lo que
nadie imaginaba, que una serie que comenzaba en 1936 pudiera alcanzar en el
tiempo al arranque de la serie insignia de TVE, Cuéntame cómo pasó, que terminaba su capítulo número uno con la
instalación en casa de su primer televisor por el que la familia Alcántara vio
la actuación de Massiel en Eurovisión y saltaron de alegría al saber que La, la, la había ganado el Festival de
la Canción.
TVE comenzó a emitir esta veterana producción en el
año 2001 con un elenco de maravillosos actores entre los que se encontraban Fernando
Fernán Gómez y Tony Leblanc. Muy pronto, los Alcántara se convirtieron en la
familia más popular de España y millones de personas seguían sus vicisitudes
cada semana. Cuéntame batió records
de audiencia y ganó numerosos premios. La historia de la época se veía
reflejada en las situaciones que la familia Alcántara tenía que sortear, desde
que Antonio no era más que el conserje de un ministerio hasta que después de
pasar por una imprenta, un negocio inmobiliario, ser traicionado por su jefe,
el siempre odioso don Pablo, Antonio se mete en política y consigue ascender.
Merche pasa de peluquera del barrio de San Genaro, a diseñadora de moda y
estudiante universitaria, y hasta preside con alegría y nerviosismo la primera
mesa electoral. Atrás quedan aquellos tiempos en que tenía que pedirle permiso
a su marido para abrir una cartilla en el banco o para trabajar. Los hijos
crecen ante los ojos de los televidentes sin dejar de darles problemas a sus
padres. Pero juntos viven una de las épocas más importantes y más recientes de
la historia del país, asistiendo a la llegada de la Transición y todos los
cambios que trajo.
Actualmente podemos ver la temporada 18 de Cuéntame todos los jueves en TVE. El
hilo temporal se encuentra a finales del año 1986 y, desde hace algún tiempo,
centra su atención en los cambios que produjeron los años 80 en la sociedad
madrileña, con la emisión, por parte de TVE del programa Ochentéame que recupera joyas de sus archivos .
Esto quiere decir que un espectador, siguiendo
únicamente las series más longevas de nuestra televisión, podría tener ante sus
ojos casi todo el siglo XX. Comenzaría viendo El secreto de Puente Viejo (que empieza en 1902 y ya va por 1924,
pero que a este ritmo podría llegar a 1936), proseguir con Amar en tiempos revueltos (que comienza en el 1936 y termina en
1957), continuar con Amar es para siempre
(que comienza en 1960 y a día de hoy va por 1968), enlazar con Cuéntame lo que pasó (que arrancó en 1968 y ya va por 1986) y, así, lograr
seguir los acontecimientos de España durante más de 80 años mediante la visión particular,
romántica y sin saltos temporales de nuestras ficciones.
Ahora el debate está en la calle y los seguidores se
preguntan: ¿se alcanzará Cuéntame a
sí misma? Es decir, ¿la familia Alcántara se sentará algún día delante del
televisor a ver el primer capítulo de la serie Cuéntame? ¿Será una paradoja temporal o una vuelta más de tuerca?
4 comentarios:
Qué bien escribes!. He visto algunas series que mencionas. Actualmente sólo sigo "Cuéntame", aunque ha habido veces que la emitían a la vez que otra serie importante y me perdí algunos capítulos.
Otra pregunta es: se encontrarán los hermanos Alcántara con sus personajes de la primera serie que hicieron juntos en el 86?. Creo que era en "Turno de oficio". No creo pero estaría súper original.
Muy locuaz MJ, muy buena exposición... :-)
Muchas gracias, Marivi. Pues sí, estaría muy bien que los hermanos Alcántara se encontraran con los personajes de la primera serie que hicieron juntos... pero ya el único que podría salir viendo en la tele "Turno de Oficio" (si fue en el 86 ya han llegado a ese año) sería Antonio, ya que a su hermano en la ficción lo han matado los guionistas :-(
Muchas gracias, J. :-)
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