Aquí cambiamos de tema ¡de buenas a primeras!

Feeds RSS
Feeds RSS

sábado, 28 de junio de 2025

Blancanieves.

The Walt Disney Company se ha embarcado en proyectos muy arriesgados a lo largo de sus más de cien años de historia. Algunos han llevado a la compañía al borde de la bancarrota y otros han sido un clamoroso éxito. El propio Disney fue el primero en empeñar su patrimonio personal cuando creía en un proyecto, aunque tuviera que enfrentarse a toda la profesión para defenderlo. Eso ocurrió con “la locura de Disney” como llamaba Hollywood a su idea de hacer un largometraje de dibujos animados. Todos estaban convencidos de que sería un fracaso total y que ahí acabaría su carrera. Pero esa “locura” resultó ser Blancanieves y los 7 enanitos (1937) el mayor éxito de público y crítica de la empresa durante décadas. 

Filmaffinity y The Walt Disney Company
Blancanieves (1937)
Imagen: Filmaffinity y
The Walt Disney Company.

¿Qué hubiese pasado si Hollywood hubiera estado en lo cierto y Blancanieves hubiese fracasado? ¿Se habría rendido Walt Disney? ¿No tendríamos esas joyas como Cenicienta, La Bella Durmiente, La Bella y la Bestia o Mary Poppins? Nunca lo sabremos porque, afortunadamente, Blancanieves impresionó a todos. En el año 1937 los cines se llenaron para ver un cuento de hadas en dibujos animados, color, sonoro, musical y con innovaciones técnicas. Marcó un hito, escribió su nombre con letras de oro en la Historia del Cine y Walt recibió un Oscar y 7 miniaturas como reconocimiento.  

El cuento de Blancanieves nunca estuvo entre mis preferidos. Tampoco me gustan esas películas en acción real que la Compañía Disney está haciendo en los últimos tiempos. La única versión que me agradó fue La Bella y la Bestia (2017) y eso que la animada y el musical habían puesto el listón muy alto. 

The Walt Disney Company.
La Bella y la Bestia en imagen real (2017).
Imagen: The Walt Disney Company.

He visto pocas de acción real y no pensaba ver Blancanieves. Pero, a veces, cuando todo el mundo se empeña en algo, consiguen el efecto contrario. Las reseñas negativas llamaron mi atención. Aún no estaba en cines y las malas críticas fueron tan abrumadoras que Disney retrasó su estreno, incluso, rehizo la película

Todos decían que no se debía haber actualizado la historia clásica. No tuvieron en cuenta que ya hay muchos ejemplos de princesas Disney a las que no les da un flechazo ni necesitan ser rescatadas por un príncipe (desde La Bella y la Bestia hasta Frozen, 2013).

The Walt Disney Company.
Frozen (2013).
Imagen: The Walt Disney Company.

Muchos de los que habían alabado la elección de Halle Bailey para La Sirenita (2023) y llamaron racistas a los que argumentaban que Ariel debía ser de piel blanca y cabello pelirrojo, ahora les parece un error que Rachel Zegler (de ascendencia latina) encarne a Blancanieves. Durante el rodaje Rachel concedió entrevistas en las que habló de feminismo y política. ¿Puede ser que eso les molestara más que el hecho de que ya no fuera “blanca como la nieve” sino “nacida en una noche de tormenta de nieve”? 

Las declaraciones de Peter Dinklage sobre lo estereotipados que estaban los miembros de la comunidad con enanismo, empujó a Disney a transformarlos en seres mágicos del bosque y que no fueran encarnados por intérpretes de carne y hueso. Y esto disgustó a los actores y horrorizó al público. 

Sí, el fracaso ha sido estrepitoso y ha supuesto grandes pérdidas para la compañía. Incluso ha paralizado proyectos de live action que estaban en marcha.

Tres versiones de Blancanieves
que se estrenaron en 2012.

En mi modesta opinión la película tiene sus aciertos: Blancanieves no es una niña tonta, dejó de serlo ya en versiones anteriores que nada tenían que ver con Disney como Mirror, Mirror (Tarsem Singh, 2012), Blancanieves y la Leyenda del Cazador (Rupert Sandrers, 2012), Blancanieves (Pablo Berger, 2012) o Blancanieves: un cuento de terror (Michael Cohn, 1997). No hay príncipe encantador, en su lugar tenemos a Jonathan, una especie de Robin Hood que me recuerda a Flynn Rider de Enredados. El film tiene muy buena fotografía y una estupenda banda sonora compuesta por los creadores de El gran Showman y La, la, land.

Aunque, ni de lejos, se acerca a los clásicos Disney, tampoco podemos calificarla como un horror. Creo que en las críticas negativas han pesado más asuntos externos a la propia película. Muchos reprochan a la factoría Disney de haberse vuelto “progre” y de ser “políticamente correcto”.

Imdb y The Disney Company.
Blancanieves (2025)
Imagen:Imdb y The Disney Company

2 comentarios:

Beauséant dijo...

El problema, sospecho, es esa señal de agotamiento que transmiten, ¿de verdad no podían hacer algo un poco más original? Lo de los enanos por ordenador, menos en la banda de ladrones que hay un enano de verdad, es una de cosas maravillosas :)

También te digo que aquí estamos, un puñado de personas adultas, criticando una película que es, simplemente, para niños, habría que preguntarles a ellos, ¿no?

Rodión dijo...

Estaba al tanto de las críticas a la película, pero no la he visto, así que no puedo opinar. De hecho, hace muchos años que no veo ningún estreno de Disney.

''Blancanieves y los siete enanitos'' es una de las imprescindibles del siglo pasado, una película que marcó un nuevo paradigma, totalmente de acuerdo. Luego siguieron otros tantos clásicos, que pertenecen a la infancia de muchas generaciones distintas, un éxito del que ninguna otra compañía de dibujos o animación puede presumir.

Pero yo no diría que Disney se haya embarcado en proyectos especialmente arriesgados; más bien, una de sus características ha sido su conservadurismo, su miedo a arriesgar. Eso fue lo que lo llevó a perder la batalla contra Dreamworks y Pixar a partir de los noventa (cuando al fin se decidió a comprar Pixar, ya era tarde) y eso que Disney seguía en la era de Michael Eisner, bajo cuya batuta la compañía tuvo su última edad dorada de verdad (la Sirenita, La Bella y la bestia, Aladdin, El rey León...). Eisner regía Disney, en sus palabras, como una enorme ''tienda de juguetes'', una mercancía que aspiraba a representar el ''mainstream'' como ninguna otra. Con los musicales de Broadway como epifenómeno, los parques de atracciones y sobre todo un potente merchandising: ahí está el negocio.

La política Disney ha sido siempre perpetuar sus propias franquicias. Políticamente correcto siempre, por descontado, adaptado a los tiempos, a los que siempre se le ha acusado de llegar tarde. Los niños y adultos seguirán disfrutando de sus películas por muchos años, no me cabe duda: ¿mejores o peores? El tiempo lo dirá.

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer este blog. Deja tu comentario, por favor :-)